MARIA,MADRE DEL BUEN CONSEJO

El día 26 de Abril celebramos la fiesta de nuestra Patrona, la Virgen María, en su advocación como Madre del Buen Consejo. Tradicionalmente, en nuestras Comunidades celebramos el día de las vocaciones trinitarias.

María es la primera mujer consagrada. Después de Cristo, es la más pura expresión de entrega personal a Dios y a la causa de la salvación, por lo que es para nosotras el primer modelo de consagración especial a la Trinidad.Todo en ella expresa una relación singularísima con el Padre,con el Hijo y con el Espíritu Santo.

María,como Madre del Buen Consejo, alimenta nuestra vocación siendo luz en nuestra búsqueda de la voluntad de Dios, consuelo en nuestro caminar, aliento en las dificultades, luz en las tinieblas, consejo en las situaciones de duda o temor.Su especialidad es dirigirnos siempre hacia Jesús,el Buen Conserjo, Haced lo que El os diga" (Jn.2 ).

En nuestra misión con la juventud encontramos en María la presencia maternal y sabia que necesitamos.Ella nos prepara para encarnar el amor entrañable que necesitan las jóvenes a las que se nos envia. Ella nos infunde el talante que requiere nuestra misión para orientar en el camino verdadero, acompañar sabiamente, y siempre señalar hacia Jesús, Buen Consejo.

María infunde en nuestro espíritu la acogida de cuantas vienen a nosotras o encontramos a lo largo del camino; entrañas maternales y misiricordiosas para dar consuelo y aliento a las jóvenes más débiles,caidas,solas o desorientadas; consejo para orientar y acompañar a la juventud en la búsqueda de su dignidad, en su crecimiento, superación o promoción.

SEMANA SANTA 2007 EN CÁCERES

Con la conmemoración de la entrada de Jesús en Jerusalén, iniciamos la Semana Santa.
Hacemos memoria-recuerdo de la Pasión,Muerte y Resurrección de Jesucristo nuestro Señor.
Son días que rezúman sentido cristiano para vivir nuestra fe.

Semana Santa de Cáceres,declarada de interés Turístico Nacional. Espascio medieval por el que se pasean las mas bellas imágenes que recrean la Pasión de Cristo, Muerte y Resurrección con el privilegio de poder emocionarse desde cualquier calle de la Ciudad Antigua, con cada paso,con cada imagen.
Pero no podemos quedarnos sólo en lo externo de la Semana Santa. Cristo dio su vida por nosotros porque habiéndonos amado nos amó hasta el extremo, Muriendo, para destruir nuestra muerte y Resucitando para estar con nosotros todos los días hasta el fín del mundo.
Los hechos presentes aquí y ahora en la Carne de Cristo que es su Iglesia y que gritan bien fuerte en sus sagradas imágenes, no son emociones pasageras, incapaces de responder a las exigencias enraizadas en lo más hondo del hombre de verdad, de bien y de belleza infinita, sino precisamente en auténtica respuesta .
El está aquí. Está aquí entre nosotros todos los días de su eternidad. Su cuerpo, su mismo cuerpo pende de la cruz. Sus ojos, sus mismos ojos tiemblan con las mismas lágrimas. Su sangre, su misma sangre sangra por las mismas llagas. Su corazón, su mismo corazón sangra con el mismo amor.
Por eso podemos cantar con estos versos:
" IBA EL SEÑOR A MARCHARSE
Y EN SU GRAN SABIDURIA
AL IRSE Y QUERER QUEDAR
INVENTÓ LA EUCARISTÍA".

Y fue al alba, sí, sucedió al alba y desde entonces a pesar de nuestro cansancio, pecado, lentitudes y cobardías sabemos que Dios nos ha abierto su casa, nos acoge, nos redime y nos regala su vida.
Por eso cantamos un !!!ALELUYA !!! mañanero, por eso cantamos al alba !!! Aleluya!!!.

PLEGARIA A MI SEÑOR.

Hay dos cosas que no quisiera perder en esta vida,
La fe que Tú me diste, Señor, cuando pequeña
Y la paciencia Señor, con que me mimas.
Escucho en silencio tus mensajes de amor cuando me hablas,
Y quiero que mi voz te llegue a Tí tambien junto a mi súplica.Amen.